Cada 1° de agosto los pueblos indígenas de América Latina celebran el Día de la Pachamama o Día de la Gran Madre Tierra.
La historia asegura que los creadores de esta tradición fueron los guaraníes. Con la llegada de la temporada fría y las inclemencias meteorológicas, las comunidades contraían enfermedades. Para combatirlas, recurrían a sus chamanes, quienes preparaban remedios caseros con hierbas medicinales. Esta hierba era utilizada con éxito contra los parásitos y determinados malestares gastrointestinales y externamente para calmar el ardor y la irritación de picaduras de bichos y alimañas.
Fue variando con el tiempo, pero la tradición dicta que hay que tomarlo el primer día del octavo mes. Sin embargo, aquellos que se olviden o no alcancen a hacerlo, tendrán la oportunidad de hacerlo hasta el 15 del mes, porque tomar té de ruda es uno de los ritos más populares.
La ruda tiene muchas propiedades beneficiosas. Es digestiva, diurética, sedante y en ocasiones se utiliza para estimular el apetito. Pero, también, hay que tener cuidado en no tomarla en grandes cantidades.
La ruda, por otro lado, según la creencia popular, es una planta que no debería faltar en ninguna casa, pues se la concibe como un verdadero conjuro contra las malas ondas, la envidia ajena y la mala suerte.